De 117 ideas enviadas por colaboradores en todo el mundo, se obtuvieron diez nuevos modelos de negocio en cuatro semanas. De los cuales, cinco se convirtieron en startups internas, con potencial para transformarse en negocios independientes en el futuro. Este fue el resultado del Digital Challenge, un programa de innovación abierta e intraemprendedorismo lanzado por Braskem para sus ocho mil colaboradores, el cual buscó soluciones a los desafíos de la empresa y de la industria química y petroquímica, por medio del intercambio de ideas provenientes de todas las regiones en donde actúa la empresa.

La iniciativa está alineada a la travesía de transformación digital de Braskem, iniciada hace tres años con la integración de su roadmap de estrategias digitales a nivel global. La empresa ha aplicado tecnologías de punta, como la machine learning, advanced analytics y sensores, y metodologías innovadoras de trabajo, como metodologías ágiles, herramientas de diseño y gestión de cambio, en diferentes partes de su cadena de valor. Estas nuevas estrategias han revolucionado la forma en cómo la empresa optimiza sus procesos operativos con enfoque en la eficiencia energética, realiza el mantenimiento de sus activos y controla la calidad de sus productos de forma predictiva, garantizándole a Braskem una postura de vanguardia en la industria 4.0.

Además de invertir en innovación en su core business, Braskem también está diversificando su cartera de inversiones, a partir de la creación de nuevos modelos de negocio y de la incubación de startups internas, desarrolladas por la propia empresa. Dichas iniciativas, denominadas empresas digitales, están ligadas a los compromisos de la empresa con el desarrollo sustentable, que en la innovación ve la adaptabilidad y el camino central en la búsqueda por un futuro más sustentable. Además, dichos negocios internos tienen como misión solucionar algunas de los males más urgentes que afectan a la empresa y a la industria en general.

"En 2018, iniciamos el proceso de transformación digital y actualmente, este se presenta como una de nuestras prioridades. Cuando incorporamos tecnologías en áreas estratégicas, como operación y mantenimiento de nuestras plantas industriales, control de calidad, asistencia técnica y logística, generamos valor para la empresa, nuestros colaboradores y clientes, reforzando nuestra posición global como referencia en la industria en la que actuamos. El objetivo es aumentar nuestro protagonismo en innovación y en la utilización de nuevas metodologías de trabajo y de tecnología de punta, fomentando nuestra competitividad, y generando impacto y resultados sustentables en los próximos años con metas ambiciosas", afirma Roberto Simões, CEO de Braskem.

El Digital Challenge fue creado para alimentar al programa de incubación de empresas digitales de Braskem. Se propuso como una invitación abierta a todos los colaboradores presentes en las regiones en las que opera Braskem (Brasil, México, Estados Unidos, Europa y Asia) para identificar los desafíos y encontrar posibilidades por medio de nuevas soluciones, potenciales clientes y diferenciales con relación al mercado. En total, el programa contempló 117 ideas, con 215 profesionales involucrados, en donde se evaluaron los criterios de creación de valor (el porte del mercado potencial para la solución propuesta y la relevancia del desafío a resolver) y mayor alineación con las prioridades de la empresa (adherencia con los objetivos y los temas estratégicos de Braskem y la oportunidad de apalancamiento de la solución por parte de la empresa).

Las diez ideas con mayor potencial para convertirse en un nuevo negocio fueron seleccionadas para recibir tutorías y capacitaciones teóricas con el Centro Digital e Innoscience, consultora corporativa de innovación y socia de Braskem en este proyecto. A lo largo de cuatro semanas, los colaboradores responsables de dichas ideas desarrollaron un caso de estudio, el cual se presentó ante el liderazgo de la empresa en formato de pitch, con el fin de buscar recursos para desarrollar la solución. En esta secuencia, las cinco ideas mejor evaluadas fueron aprobadas y, en el futuro, se convertirán en startups internas. Entre los temas de los proyectos, el de mayor adhesión fue sustentabilidad, con el 70 % de las propuestas vinculadas.

La expectativa es crear nuevas fuentes de ingresos, transformar fricciones o riesgos de mercado en oportunidades, fortalecer a la empresa y aumentar su competitividad. Además, la iniciativa tenía por objeto resolver problemas del sector, mediante la creación de soluciones para desafíos internos, para los cuales aún no existe solución adecuada en el mercado, y empoderar a los colaboradores para que sondeen nuevas competencias y formas de trabajo.

Para Ana Paula Lobo, coautora de una de las diez ideas seleccionadas y parte del equipo de Innovación y tecnología, la oportunidad fue una experiencia transformadora en todo momento, desde la selección de la idea hasta la presentación ante el alto liderazgo de la empresa. "Vivir esta travesía cambió muchísimo mi punto de vista sobre cómo subvencionar una idea, además de permitir mi desarrollo en habilidades esenciales para el que quiere emprender, como creer en el potencial de la idea, ejercer empatía para entender las aflicciones del público-objetivo, tener resiliencia para adecuar el proyecto original, lidiar con las frustraciones y ser asertiva en la comunicación. ¡Fue una experiencia única y motivadora en mi carrera!", concluye Lobo.

Aparte de ratificar el compromiso con la innovación digital, el Digital Challenge posibilitó el crecimiento profesional y personal de los participantes, al expandir su visión de negocios, proporcionar una experiencia en el trabajo en nuevas formas de trabajo y al reforzar la cultura de la empresa, en pro de la creatividad, de la innovación, del emprendedorismo y del liderazgo de forma democrática e inclusiva.